Pensando en voz alta

Caja Rural hace bien en mantener la actividad de Zamora 10

Me ha parecido un poco precipitada, después de cuatro años y medio de trabajo, la salida de la Cámara de Comercio, CEOE-Cepyme y Azeco, de Zamora 10. Tengo para mí que Caja Rural no se lo merece. Como no se lo merece su director general, Cipriano García. Un nombre que pronuncio con respeto. Está lleno de proyectos que poco a poco va haciendo realidad, es respetado dentro y fuera de nuestra provincia y, además, sigue teniendo intacta la ilusión por las posibilidades de esta tierra. No se puede pedir más. El otro día en un digital nacional, se le ha dedicado un reportaje que hace honor a la verdad, que dice y reconoce lo que en Zamora cuesta decir y reconocer.

A lo mejor, Caja Rural, no puede seguir siendo quien se eche encima todos los problemas, tantos, como hay que resolver. A lo mejor tiene que plantarse y que sean los demás quienes den muestras de su eficiencia y eficacia inexistente. Zamora está acostumbrada a la subvención y cuando las administraciones no cumplen se mira hacia la entidad zamorana con esperanza y con alivio. Y cuando no es Caja Rural es su Fundación, dirigida con mano firme por Feliciano Ferrero, quien viene a sacar las castañas del fuego a tantas colectividades y en tantos eventos. A lo mejor también Fundación tiene que hacer un giro en su orientación.

Artículo de opinión completo en: La Opinión de Zamora (Carmen Ferreras)